Nuevo golpe contra la piratería, esta vez en Reino Unido. El pasado 26 de mayo la justicia británica ordenó el bloqueo de siete webs que facilitaban acceso ilegal a libros. La asociación de editores británicos, Publishers Association (PA), fue la encargada de poner en conocimiento de la justicia este hecho.

La PA elevó su queja al Tribunal Supremo y alegó que en las webs Ebookee, LibGen, Freshwap, AvaxHome, Bookfi, Bookre o Freebookspot más del 80 por ciento del material puesto a disposición de los usuarios infringía los derechos de autor. Por este motivo los editores británicos solicitaron el cierre de las mismas.

La PA ha asegurado en un comunicado que se sentían «muy contentos» con la decisión del Tribunal Supremo, y consideraban que de esta manera se reconocía «el daño infligido a los editores del Reino Unido y a los autores desde estos sitios web infractores».

La denuncia que había interpuesto la asociación de editores afectaba a más de 10 millones de títulos. La PA asegura haber enviado cerca de un millón de peticiones de retirada de esos títulos, así como la solicitud a Google de eliminación en los resultados de búsqueda de 1,75 millones de urls que enlazaban a estos contenidos en las siete webs.

Tras la sentencia, Richard Mollet, director ejecutivo de la PA de Reino Unido, afirmaba que «Ahora un tercio de los ingresos de los editores provienen de las ventas digitales, pero por desgracia esta subida en el mercado digital ha traído consigo un crecimiento de la infracción en línea». Y añadió que «Nuestros miembros tienen que ser capaces de proteger las obras de sus autores frente a esta actividad ilegal, los escritores deben ser pagados y los editores tienen que poder seguir innovando e invertir en nuevos talentos y material».

De esta forma, se abre una nueva vía de actuación en Reino Unido en cuanto al bloqueo de webs que vulneran los derechos de autor del sector editorial.