¿Por qué estaban los brigadistas en Castelldefels? Visita al castillo, a la exposición temporal y a su última prisión en España
Dia 28 de gener a les 11,00 hores
Porta principal del Castell
Avda. Manuel Girona s/n
Castelldefels
Organitza: Laberinto de Ariadna
Presentació: Alfonso López Borgoñoz, Anna Rossell
i Felipe Sérvulo
Durante la Guerra Civil Española (1936-1939), las Brigadas Internacionales fueron unas unidades militares compuestas, principalmente por voluntarios extranjeros que procedían de 54 países. Lucharon a favor de la República española, frente a las tropas militares dirigidas por el general Franco, ayudado por los ejércitos de Alemania e Italia.
La cifra exacta no es segura. El total inscrito fue de 35.252 brigadistas (hay fuentes que hablan de 59.380 personas), pero no hubo nunca más de 20.000 hombres a la vez, murieron 9.934.
La nacionalidad más numerosa entre los brigadistas era la francesa, con unos 10.000 voluntarios. Los alemanes y los austríacos fueron unos 5.000, en su mayoría exiliados en París y en Bruselas como consecuencia del ascenso del nazismo. Otros contingentes importantes fueron el italiano (con 4.000 miembros), el británico (con 2.500), el norteamericano (2.000) o el millar de sudamericanos. Procedían de estratos sociales muy diferentes, desde intelectuales a trabajadores manuales, y algunos de ellos acabarían convirtiéndose, por diferentes razones, en personajes de notable importancia histórica.
Voluntarios en defensa de la República
La participación de voluntarios extranjeros a favor de la República durante la Guerra Civil fue constante desde el comienzo del conflicto. El 18 de julio de 1936, fecha del inicio de la guerra, muchos atletas que aquel verano iban a participar en la Olimpiada Popular de Barcelona se unieron en una brigada y algunos, como el austríaco Mechter, morirían sólo un día después. En agosto, un batallón formado por franceses y belgas entró en combate en Irún.
La creación de las Brigadas Internacionales
La idea original de la creación de las Brigadas Internacionales se presentó en Moscú el septiembre de 1936. Se trataba de captar voluntarios comunistas y no comunistas para participar a la guerra en apoyo de los republicanos españoles. En un primer momento, el Gobierno de la República no se decidió a aceptar la propuesta, pero cambió de opinión en octubre, cuando los primeros combates mostraron las dificultades para obtener la victoria.
Los primeros pasos
La base de las Brigadas Internacionales se situó, en aquel momento, en el aeródromo de Los Llanos, en Albacete, donde también estaba el Estado Mayor de la Aviación Republicana. Los primeros voluntarios empezaron a llegar el 12 de octubre, pero pronto el primer comité organizador se vio superado por el gran número de brigadistas y se transformó en un comité militar.