La poesía es para quienes la leen”. Lo decía, con voz débil pero feliz, el poeta valenciano Francisco Brines el día en el que le comunicaron que había ganado el premio Cervantes 2020. Un galardón que en esta ocasión no se va a poder entregar el día 23 a causa de su delicada salud y de las restricciones que impone la pandemia. “Mi salud es como es y yo no soy un nadador de aguas bravas”, comentaba también ese día el gran poeta desde su casa de campo, ubicada en la paradisíaca partida de Elca, en Oliva.
A pesar de ello, instituciones culturales y políticas han programado multitud de actividades para que la obra de Brines protagonice una semana en la que el mundo de la cultura le quiere rendir homenaje. Desde el Ministerio de Cultura, el Instituto Cervantes, la Residencia de Estudiantes, la Universidad Complutense de Madrid, el Círculo de Bellas Artes de Madrid, el Gremio de Editores, la Asociación Colegial de Escritores o la Fundación Brines, entre otras muchas.
En los más de 60 actos que tiene programados esta semana el Instituto Cervantes en los distintos centros en los que tiene presencia internacional y en España, habrá siempre una “mirada especial a Francisco Brines”. El verso “Mi testigo, lector, pongo en tus manos” y otro de El otoño de las rosas servirán de lema para estas actividades.
Aunque no habrá, por segundo año consecutivo, la entrega del premio en la Universidad de Alcalá de Henares, los Reyes acudirán mañana a esta localidad madrileña para presidir la lectura dramatizada de clásicos del siglo de oro, junto con el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes. Un acto en el que se proyectará un vídeo de Francisco Brines leyendo poemas suyos y tras el que los reyes realizarán una visita a la Biblioteca Patrimonial del Instituto Cervantes, junto con Luis García Montero.
El president valenciano, Ximo Puig, ha asegurado también esta semana que “es un orgullo para nuestra tierra y para nuestra cultura ser asociados a la voz de Paco Brines”. Por ello, la Generalitat Valenciana ha anunciado que va a poner los medios necesarios para que “todos los hispanohablantes y todos aquellos que aman la poesía conozcan más y mejor su obra”.
Miembro del grupo poético de los años 50, autor de obras de referencia como Las brasas (1960) o Palabras a la oscuridad (1966) , admirador de la obra de Gonzalo de Berceo, César Manrique y, especialmente, de su querido Ausiàs March, Francisco Brines ha logrado convertirse en poeta fundamental de la lengua castellana. Con una poesía intimista, que aborda el paso del tiempo, de la experiencia de la niñez, del amor. El homenaje que esta semana le rinde el mundo de la cultura es, simplemente, merecido.