Mensaje de amistad, este era el “asunto” de los correos electrónicos que nos intercambiábamos.
Las conversaciones vis a vis se prolongaban con nuestros e-mails. La poesía y el cuestionamiento de los géneros musicales eran los asuntos recurrentes. Con José Costero no se acababa nunca la charla reflexiva y al final, siempre algún comentario de música, a José le gustaba Mozart. El orden y el equilibrio de la música de Mozart parecían estar presentes en su poesía. Buscaba el adjetivo preciso, el sustantivo riguroso y componía con rigor: sujeto+verbo+predicado.
Escribía prosa y volvía a la poesía.
Poeta de oficio, su poesía era la de un luchador sabio, capaz de dejar los versos algún momento y escribir sobre el “asesinato de un obispo” o sobre las andanzas del detective Ruano.
Escribió novela negra donde denunciaba la prepotencia de los mercados y la corrupción de los políticos y volvía a la poesía.
La amistad -le dije- amigo José, es la más alta expresión de la poesía. Me miró y me contestó con un “sí” escueto.
Francesc Cornadó
La ceremonia de despedida tendrá lugar el día 28 de octubre a las 10,30 horas
Oratori B - Sancho de de Ávila - Carrer Almogàvers, 93 i 99 de Barcelona