Un paro cardíaco acabó, el pasado 18 de febrero en
Caen (Francia), con la vida del escritor y cineasta francés Alain
Robbe-Grillet. Máximo exponente del nouveau roman, corriente
literaria que en la década de los 50 planteó cambiar el realismo que
imperaba entonces en la manera de narrar a base de la búsqueda de
formas radicales, Robbe-Grillet pasará a la historia por haber
redactado el manifiesto fundacional de este movimiento, que congregó
voces como la de Michael Butor y Natalie Sarraute.
Autor de Las gomas, El mirón y La casa de citas, el autor francés publicó en el año 2001 su novela Reanudación,
editada, como otros títulos suyos en Anagrama. Con esta undécima obra,
en la que recuperó su obsesión por el sexo, rompía veinte años de
silencio narrativo. Pero continuó hasta el último momento en su afán
rupturista de límites, y el año pasado publicó Un roman sentimental, último texto de este empedernido provocador, que fue la culminación de su afición por el marqués de Sade.
Además de la literatura, otro de los intereses de Robbe-Grillet fue el cine. Escribió reconocidos guiones, como L’année dernière a Marienbad,
del cineasta Alain Resnais. En 2004 le nombraron miembro de la Academia
Francesa, aunque nunca llegó a tomar posesión formal de su cargo.
La noticia en la prensa francesa:
Le
Figaro / Le
Monde / Libération / Lire /
Le
Nouvel Obsérvateur