Las jornadas ¿Dónde están las dramaturgas?, organizadas por la Asociación Colegial de Escritores y Escritoras de Cataluña (ACEC) tienen como objetivo reflexionar sobre el trabajo y la presencia pública que tienen las escritoras de teatro o las directoras de escena. “¿Cuántos nombres conocemos? se pregunta una de las coordinadoras del encuentro, Isabel Franc.  Carme Portaceli y pocos más. Estas jornadas quieren reivindicar el papel de la mujer como dramaturga en un sentido amplio”.

Desde hoy hasta el jueves 28 de marzo, el Centro Francesca Bonnemaison de Barcelona acogerá este encuentro donde se plantearán y analizarán cuestiones como ¿cuáles son las estrategias creativas de las dramaturgas?, ¿dónde tienen más presencia, en los espacios públicos o alternativos? ¿se encuentran con problemas específicos por ser mujeres?, ¿hay paridad?...

“A priori no hay diferencia entre la dramaturgia masculina y la femenina, pero los referentes son distintos de los unos y las otras, por lo que habitualmente los temas y las miradas lo son también” explica Isabel Franc.

Victoria Szpunberg, que abre la jornada en un diálogo con Claudia Cedó, define el teatro como “un espacio de encuentro con la imaginación”. Su poder cultural, social, catártico, reivindicativo y directo lleva, incluso, a que el público forme parte de la dramaturgia. Como comenta Franc “dentro del mundo de la escena la dramaturgia es todo”. El texto dramático está pensado para ser representado, lo que la autoría es compartida. La puesta en escena, los decorados, la dirección, la interpretación, la música, los silencios, hasta las luces, forman parte del texto.

Este es otro de los aspectos que se tratará en las jornadas. Las artes escénicas son una expresión artística colectiva, lo que en numerosas ocasiones supone que el texto no pertenezca una sola persona sino al fruto de la labor de varias. ¿Cómo se gestiona el texto dramático cuándo corresponde a una autoría compartida? ¿Tiene ventajas asociarse para crear y representar un texto? Para responder a estas preguntas y conocer cómo se organizan algunas de las compañías teatrales de mujeres, Cristina Serrat, del Proyecto Vaca, un grupo teatral de dramaturgas con 20 años de historia, y Teresa Urroz, de Descabelladas, una compañía de artes escénicas inclusiva donde participan mujeres en procesos de enfermedad graves o crónicos, con diversidad funcional o en situación de dependencia, presentarán sus dos proyectos, que tienen en común una marcada intención social.

Las jornadas finalizarán con la representación de la obra De Generacions, una parodia sobre los desacuerdos entre dos generaciones de feministas, dirigida por Ariadna Martí, con Julia Valdivieso, Isabel Franc y Nilo Martín.

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