Numerosas personalidades del mundo de la cultura se han solidarizado con Roberto Saviano después de que la Justicia italiana admitiera la denuncia por difamación del ministro de Interior y líder de la Liga, Matteo Salvini, contra el autor de 'Gomorra'.
Roberto Saviano confirmó que deberá enfrentarse en los tribunales con el líder de la Liga. "Seré juzgado por llamar al ministro del Interior 'Ministro de la Mala Vida'. Reitero plenamente mi definición, defiendo la legitimidad y enfrento con serenidad y orgullo el proceso", escribió el periodista amenazado por la Camorra, la mafia napolitana, en un artículo publicado en el diario La Repubblica.
El líder de la Liga presentó una querella contra el escritor el pasado verano después de que éste criticara la política de cerrar los puertos italianos a los barcos de rescate impuesta por Salvini nada más llegar al poder. Saviano se refirió al ministro de Interior y vicepresidente del Gobierno como un "bufón" y le llegó a definir en varios artículos e intervenciones públicas como "ministro de la Mala Vida", una expresión que en Italia se utiliza para referirse a la mafia y a la criminalidad organizada.
"Saviano se ha ofendido, me ha atacado y ha hecho un vídeo. Dice que ha hecho sólo crítica política al ministro. Pero él me llama ministro de la Mala Vida y esta no es una crítica política", dijo este fin de semana Salvini defendiendo su decisión de llevar hasta los tribunales al escritor por difamación.
La 'vendetta' judicial de Salvini ha indignado a gran parte del mundo de la cultura. Desde Javier Cercas hasta Salman Rushdi, numerosos intelectuales han condenado los ataques del político contra el periodista napolitano.
"No me gusta Matteo Salvini. Me parece el político más inquietante de la Europa actual", denuncia Javier Cercas. El autor de 'Soldados de Salamina' reconoce el derecho de recurrir a la justicia del líder de la Liga pero apunta que lo que "no tiene derecho a hacer" es usar su cargo para "intimidar a un ciudadano porque no le gustan sus opiniones, como hizo cuando insinuó --recuerda el escritor-- la posibilidad de retirar la protección a Saviano". "Sólo espero que la magistratura italiana admita que llamar al ministro de Interior Ministro de la Mala Vida es lo que parece: un modo legítimo de criticar al poder".
Los escritores Luis Sepúlveda, Erri De Luca o Fernando Aramburu también se sumaron a la ola de solidaridad en favor de Saviano. "Un hombre que desde una posición de poder arquitecta cómo castigar a quien lo critica es un hombre débil", aseguró el autor de 'Patria'.
La 'guerra' dialéctica entre Matteo Salvini y Roberto Saviano no es nueva. El autor de 'Gomorra' ha denunciado en repetidas ocasiones el populismo del que hace gala con orgullo el líder de la antigua Liga Norte. Cuando Salvini llegó al Gobierno el pasado mes de junio, amenazó con retirar la escolta al escritor, que vive bajo protección oficial desde hace más de diez años.
El escritor Salman Rushdie, que también vive amenazado desde hace décadas, condenó "el último ataque" a los derechos de su compañero y mostró su solidaridad. "Nosotros escritores estaremos siempre del lado de Saviano", aseguró Rushdie. Por su parte el novelista y poeta Manuel Vilas aseguró que la denuncia de Salvini es "un ataque a la libertad de expresión, a la democracia, a la cultura". "Es inaceptable e intolerable -sostiene el autor de 'El hundimiento'-- utilizar la maquinaria legal del Estado para perseguir el libre ejercicio de la literatura y de la crítica". En este mismo sentido se manifestó el escritor británico Hanif Kureishi, quien denunció que Salvini "ofende" la "reputación de Italia en Europa como nación de artistas, escritores y filósofos".
En el artículo publicado en el diario La Repubblica, Roberto Saviano reconoce estar "preparado para ser juzgado por un crimen de opinión". "La lucha contra los intelectuales no es algo nuevo para quien intenta hacer autoritario un gobierno", escribe. "Con el único instrumento que tengo, la palabra, yo no le daré nunca tregua. No daré tregua ni a una sola mentira de las que ha pronunciado y pronunciará".
Soraya Melguizo
El Mundo