La sede de la Reial Acadèmia de Bones Lletres acogería a entidades del mundo del libro
La Reial Acadèmia de Bones Lletres pronto podría tener nuevos habitantes. El Departament de Cultura pretende hacer del Palau Requesens, su sede actual, la futura Casa de les Lletres y juntar allí diferentes entidades culturales vinculadas al sector del libro.
Se trata de un proyecto que está en fase muy inicial, por lo que se desconoce qué agrupaciones exactas se trasladarían hasta allí, aunque resuenan algunas, como la Institució de les Lletres Catalanes, el PEN Català, la Asociación Colegial de Escritores de Catalunya (ACEC) o la Associació d’Escriptors en Llengua Catalana (AELC). La mayoría de ellas prefiere mantenerse al margen hasta que el proyecto se oficialice, aunque la AELC, que tampoco confirma si cambiará o no de ubicación más adelante, recuerda que se trata una reivindicación que lleva haciendo desde hace más de dos décadas junto con otras entidades autorales y que espera que se pueda concretar en los términos recogidos en el Pla Nacional del Llibre i la Lectura.
Fuentes de la Reial Acadèmia de Bones Lletres explican a La Vanguardia que la propuesta les llegó “hará cosa de seis meses” por parte del Departament de Cultura. Hasta ahora, existía un convenio entre ambas partes, pero Cultura habría decidido no prorrogarlo y proponer uno nuevo “vinculado a unas obras de reconstrucción porque el Palau Requesens necesita ser reformado con urgencia. Hace falta un ascensor, cambiar la instalación eléctrica… Una intervención seria que no es cosa de cuatro días”.
Por ahora, lo único seguro es que “este año está previsto firmar el nuevo convenio y, seguramente antes del verano, se concretará la perspectiva de obras. De todos modos, no hay fechas para que estas empiecen, ya que depende de la Generalitat. La ruta a seguir sería, por tanto, hacer el proyecto, aprobarlo, incluirlo en los presupuestos y hacer la licitación”.
Cuando todo esto ocurra y el Palau esté en mejores condiciones, se podrá acoger a estas instituciones, que “dejarán sus actuales locales y se instalarán en algunos espacios entre la segunda y la tercera planta”. La Acadèmia, instalada en el Palau desde hace más de cien años, permanecerá “en la planta principal, la primera, y en una parte de la segunda. Habrá unos espacios compartidos, como la sala bautizada como ‘tinellet’ —llamada así por su semejanza con el Tinell de la plaza del Rei—, y otros que ocuparan las entidades vinculadas al Departament.”
Desde la Acadèmia aseguran que, aunque “no es un proyecto inmediato” y que, por lo tanto, “no sería una realidad este año”, la idea es “muy positiva” ya que el Palau “se convertiría en un centro de dinamismo cultural potente tanto para el barrio como para Barcelona”.
El Palau Requesens de Barcelona es un monumento catalogado como Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN). Situado a dos minutos de la plaza Sant Jaume y de la basílica dels Sants Màrtirs Sant Just i Pastor, en el barrio Gótico, era el edificio residencial más grande que existía en la ciudad en la época medieval. Perteneció a la familia Requesens, una de las más importantes de la nobleza catalana.
Pese a que se trata de una joya arquitectónica situada en el centro de la capital catalana, son muchos los barceloneses que no tienen el placer de conocerlo, como tampoco los tesoros que en su interior alberga, entre los que destaca su patio novecentista. En parte se debe a que se encuentra en el oscuro callejón sin salida del Bisbe Caçador. Si finalmente la Casa de les Lletres se convierte en realidad, todo apunta a que más visitantes se acercarán.
Un proyecto municipal del mismo nombre
El ayuntamiento de Barcelona lanzó su propio proyecto de Casa de les Lletres cuando, en el 2017, en el marco del festival Kosmopolis, el entonces teniente de alcalde Jaume Collboni aprobó crear una para “acoger y aprovechar las sinergias del mundo editorial y literario de la ciudad” y estableció el 2019 como fecha de su apertura y hasta dio una dirección: calle Roc Boronat 99-115. Se anunció entonces que sería la sede, al menos de la oficina Barcelona Ciutat Literària de la UNESCO, así como del Consorci de Biblioteques de Barcelona, y que se añadiría a la red de fábricas de creación de la ciudad como espacio de residencia de creadores. El proyecto quedó en suspenso tras la ruptura del pacto de gobierno entre Comunes y PSC, aunque aún está previsto que, tras las obras correspondientes, vayan allí la oficina de Barcelona Ciutat Literària, las bibliotecas y otras entidades del sector.